Desde que Níger se unió a la Alianza del Sahel, formada por Malí, Níger y Burkina Faso, Niamey se ha mostrado abierta a tratar con Argel, a diferencia de otras juntas militares que han optado por distanciarse del país norteafricano.
En plena tensión regional en el Sahel, especialmente tras la entrada de Rusia en la región y los numerosos golpes de Estado, el primer ministro nigerino, Mohamed Lamine Zain, ha viajado a Argelia con su ministro de Defensa, el teniente general Salifu Modela.
Esta visita se considera una oportunidad para que Argelia intente influir en el nuevo panorama geopolítico de la región tras varios desencuentros diplomáticos con países como Mali.
Sigue a una visita similar realizada hace unos días por el ministro argelino de Energía y Minas, Mohamed Arkab, a Níger para examinar el desarrollo del gasoducto africano que une Nigeria y Europa, y que pasa por el país saheliano.
Durante la visita de la delegación nigerina a Argel, el Primer Ministro argelino, Mohamed Nadhir Arbawi, destacó «la especial importancia» que el Presidente Abdelmadjid Tebboune concede al desarrollo de las relaciones bilaterales «con la hermana República de Níger», subrayando «las históricas relaciones fraternales que unen a los dos países y pueblos hermanos».
En un comunicado, Al-Arbawi añadió también que «los dos países aspiran a lograr una cooperación bilateral que alcance mejores niveles en el marco de los mecanismos bilaterales y mediante el intercambio de visitas de alto nivel, con el fin de aplicar los programas de cooperación existentes y completar los proyectos conjuntos de desarrollo».
Desde que Níger se unió a la Alianza del Sahel, formada por Malí, Níger y Burkina Faso con apoyo ruso, Niamey se ha mostrado abierto a tratar con Argel, a diferencia de otras juntas militares que han optado por distanciarse del país norteafricano.
Mali, por ejemplo, anunció el fin del acuerdo de reconciliación nacional que Argelia patrocinaba desde 2015 e incluyó a la nación árabe en la lista de países con los que no se recomienda cooperar -como es el caso de Francia y EEUU- provocando una crisis sin precedentes.
Por el contrario, Argelia ha estrechado lazos con Níger mediante visitas oficiales desde el golpe militar contra el presidente Mohamed Bazoum, aunque la junta militar rechazó la iniciativa de mediación propuesta por Argel.
Los dirigentes de ambos países parecen decididos a mantener sus relaciones bilaterales, especialmente en lo que se refiere ainfraestructuras y proyectos económicos, como el gasoducto africano.
La visita de la delegación nigerina a Argelia se produce en un tenso contexto regional de escalada de la violencia entre el ejército maliense -respaldado por las fuerzas rusas de Wagner y Turquía- y facciones armadas del Azawad , cerca de la frontera común.
Por ello, el gobierno de Níger trata de preservar sus intereses con su vecino del norte, mientras que Argelia intenta, a través de su vínculo con Niamey, ganar influencia en el Sahel.
Las autoridades argelinas subrayaron que la visita de los ministros nigerinos «reviste una gran importancia», indicando que Argelia siempre ha desempeñado un papel decisivo en los esfuerzos de desarrollo gracias a su actitud positiva hacia Níger, «especialmente en los momentos difíciles». Argelia también ha aprovechado esta visita para subrayar que el Presidente Tebboune rechaza cualquier intervención militar en Níger.
Por su parte, el Primer Ministro de Níger, Mohamed Lamine Zein, expresó «el compromiso de los dirigentes, del gobierno y del pueblo de su país con la asociación y la cooperación con Argelia», subrayando los lazos de «fraternidad, amistad y buena vecindad».
Zein expresó asimismo su deseo de avanzar en el refuerzo de la cooperación bilateral, de manera que contribuya a los esfuerzos de Níger para reforzar su soberanía nacional sobre sus riquezas, alcanzar los objetivos de estabilidad y desarrollo, y hacer frente a los desafíos comunes a los que se enfrenta la región.
En el ámbito militar y de seguridad, que se ha convertido en un pilar importante de las relaciones entre ambos países, el jefe del Estado Mayor argelino, teniente general Said Chengriha, recibió al ministro de Defensa de Níger, teniente general Salifu Modi.
Según un comunicado del Ministerio de Defensa argelino, Chengriha consideró esta visita como una prueba de la voluntad de las dos partes de «reforzar la coordinación en materia de seguridad y la cooperación militar bilateral entre los ejércitos de los dos países».
El Jefe del Estado Mayor del ejército argelino subrayó asimismo que su país está convencido de que la solución de los problemas internos de los países africanos sólo puede lograrse internamente «a través de las competencias, capacidades y fuerzas de los países del continente».
Por su parte, el teniente general Salifu Modi destacó «el consenso de puntos de vista de las dos partes sobre todas las cuestiones de seguridad abordadas en las conversaciones bilaterales» y su esperanza de «reforzar las relaciones de cooperación entre su país y Argelia, basadas en la concertación y el respeto mutuo».