Terrorismo en Malí central: Hamadou Kouffa pone condiciones previas antes de negociar con Bamako

Terrorismo en Malí central: Hamadou Kouffa pone condiciones previas antes de negociar con Bamako

A. M. C. con Le Monde Afrique

El fundador del Frente de Liberación de Macina, Hamadou Kouffa, que está desestabilizando el centro del país, exige la salida de la fuerza francesa «Barkhane» y de la misión de la ONU, entre otras cosas, como requisitos previos a las negociaciones con el gobierno central.

Esta información fue revelada el 25 de julio por nuestros colegas del diario digital Le Monde Afrique. A finales de mayo, dos emisarios de Hamadou Kouffa, fundador del Frente de Liberación de Macina (FLM), movimiento yihadista maliense, viajaron a Bamako para llevar un mensaje al profesor Ali Nouhoum Diallo, ex presidente de la Asamblea Nacional y, sobre todo, figura emblemática de la comunidad peuhl.
«Hamadou Kouffa les había pedido que le dijeran al profesor que ambos odian las mentiras y a los mentirosos. Y que, por tanto, podían hablar», declaró a Le Monde Afrique un testigo de estas negociaciones, que se encontraba en París.

Según él, Hamadou Kouffa, predicador fulani activo en la región de Mopti y cabecilla de un movimiento que ha reivindicado varios atentados mortales y bombardeos en la zona desde 2015, ha puesto como primera condición para cualquier negociación con el Gobierno la salida de la operación Barkhane.

Lanzada en agosto de 2014, la misión de la fuerza francesa incluye la lucha contra el terrorismo en la franja sahelo-sahariana, que se extiende desde Mauritania hasta Chad pasando por Mali, Burkina Faso y Níger.

«Hamadou Kouffa cree que mientras Barkhane esté en Malí, el presidente Ibrahim Boubacar Keïta nunca podrá aplicar los compromisos que adquiere», explica una de las manos derechas de Ali Nouhoum Diallo.

La segunda condición impuesta por el fundador del FLM es la salida de la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de las Naciones Unidas en Malí (Minusma). «No es sorprendente que siempre haya pedido la salida de todas las fuerzas extranjeras, incluidos los cascos azules. Quiere que los malienses hablen entre ellos sin intermediarios ni testigos», afirma nuestra fuente.

«Sin intermediarios ni testigos»

Por último, el tercer requisito para cualquier negociación: en la primera fase de las conversaciones con Bamako, Hamadou Kouffa exige tener como interlocutor al profesor Ali Nouhoum Diallo. Los días 2 y 3 de mayo, Diallo presidió en Mopti una conferencia destinada a contribuir al restablecimiento de la paz en el centro de Malí. En presencia de unos 180 participantes, veló por que las personas que reivindicaban abiertamente a Hamadou Kouffa pudieran expresarse libremente.

«Fue en esta reunión donde comenzaron las negociaciones. Estaba claro que había lugartenientes de Hamadou Kouffa entre los asistentes.

Sin duda fueron a decirle lo que había dicho el profesor Ali Nouhoum Diallo, que si Kouffa ama la verdad y odia la mentira, debería acercarse a él», afirma un participante en la reunión de Mopti.

Se cree que el líder yihadista está escondido en el centro de Malí, probablemente en el bosque de Wagadou, a 70 km de la frontera con Mauritania y de difícil acceso. A pesar de los medios desplegados por las fuerzas armadas malienses y la operación Barkhane, este fiel lugarteniente de Iyad Ag Ghali, el líder de Ançar Eddine con el que creó el Groupe de soutien à l’islam et aux musulmans (GISM), sigue moviéndose por los pueblos de la Macina, donde se le percibe como un defensor de los derechos de los peuls.

Según una fuente fiable, fue Hamadou Kouffa quien organizó este año el cruce del río Níger en la Macina por los pastores fulani que se dirigían a la trashumancia. «No había administración ni fuerzas de seguridad malienses. Fue Hamadou Kouffa quien supervisó el cruce de los animales en tres puntos del río Níger. Y todo fue muy bien», dice una respetada figura de la comunidad fulani, medio sorprendida y medio divertida.

Posición poco clara del gobierno

La posición del gobierno maliense sobre el principio de las conversaciones directas con los grupos yihadistas sigue sin estar clara. La mayoría de los participantes en la Conferencia del Acuerdo Nacional celebrada en Bamako en marzo dieron a entender que el gobierno estaba abierto a la negociación. Pero pocos días después, Ibrahim Boubacar Kéita descartó de plano cualquier posibilidad de
conversaciones con «los terroristas».

«En estos momentos, no tenemos la capacidad material para derrotar a estos grupos yihadistas por la fuerza. La realidad impone que hablemos con Iyad Ag Ghali y con todos los demás yihadistas, con la única condición de que sean malienses», declaró a Le Monde Afrique Tiébilé Dramé, presidente del Parti pour la renaissance nationale (Parena).

Varias personalidades, entre ellas Mahmoud Dicko, presidente del Alto Consejo Islámico de Malí, piden abiertamente que se negocie con Iyad Ag Ghali, Hamadou Kouffa y los demás. Por el momento, el Presidente Kéita y su gobierno se resisten a dar el paso. Sin duda temen encontrarse en una posición incómoda ante la comunidad internacional y, en particular, ante Francia.