Veinticinco civiles murieron el martes en un atentado perpetrado por presuntos yihadistas en el oeste de Níger, cerca de Malí, anunció el miércoles por la noche el Ministerio del Interior nigerino.
Afriquinfos
Un informe previo de fuentes locales a la AFP situaba el número de civiles muertos en torno a la decena. El martes, «el campamento de Bakorat (…) en el departamento de Tillia fue objeto de un ataque por parte de individuos armados no identificados», indicó un comunicado del Ministerio del Interior leído en la radio. El balance provisional era de «25 muertos, un herido y dos vehículos quemados», añadía.
El ministerio deploró un segundo ataque en la localidad de Témaram, en el departamento de Tahoua, perpetrado por «individuos armados no identificados» que «incendiaron o saquearon» «infraestructuras sociales», entre ellas el ayuntamiento, el centro de salud y la Société nigérienne d’électricité (Nigelec). Dos agencias de transferencia de dinero también fueron «saqueadas», según el Ministerio. «Las operaciones de limpieza han comenzado y continúan en las zonas afectadas», añadió.
Bakorat y Tébaram se encuentran en la región de Tahoua (oeste), en la frontera con Mali. «Un violento enfrentamiento tuvo lugar ayer (martes) entre un grupo de hombres armados y una milicia de autodefensa en Bakorat», había declarado anteriormente un político local, informando de que «una decena de milicianos resultaron muertos».
Según el diario «Aïr Info», citando a «un superviviente», «los atacantes llegaron hacia las 14h00 (13h00 GMT) en 6 vehículos 4×4, precedidos por varias motos».
Fue en este mismo departamento de Tillia donde 141 civiles fueron masacrados el 21 de marzo de 2021 por presuntos yihadistas en varios ataques contra las localidades de Bakorat, Intezayane, Woursanat y varias otras aldeas y campamentos, según un informe oficial.
Se trata de los atentados más mortíferos de los últimos años en un país habitualmente sumido en el luto por este tipo de acciones. Tillabéri -en la zona de la triple frontera con Burkina Faso y Mali- y Tahoua, dos regiones vastas e inestables, han sido escenario de ataques mortales de grupos armados vinculados a Al Qaeda y al Estado Islámico (EI) desde 2017.
En las últimas semanas, han surgido milicias de autodefensa en varias localidades objetivo de estas dos regiones. A principios de noviembre, al menos 69 aldeanos, entre ellos el alcalde de la comuna de Banibangou, fueron asesinados por presuntos yihadistas en la región de Tillabéri (oeste), también cercana a Mali.
Según fuentes locales entrevistadas por la AFP, el alcalde dirigía los «comités de vigilancia» de varios pueblos de su comuna cuando fueron «emboscados» por hombres armados.