Héni Nsaibia
ACLED
Introducción: La milicia de cazadores de autodefensa de los Dogon
Dan Na Ambassagou es una organización paraguas lealista de grupos de autodefensa de las aldeas Dogon (HRW, 4 de febrero de 2020). Actúa en el centro de Malí, con su bastión en la Escarpa de Bandiagara, también conocida como los Acantilados de Bandiagara. Está compuesto principalmente por personas de etnia dogón, pero también incluye a miembros de otros grupos étnicos como los dafing, samogo, bobo, telem y mossi (Resolve Network, 29 de noviembre de 2021). El núcleo del movimiento está formado por cazadores tradicionales, dozo (o dana en lengua dogón), y el nombre Dan Na Ambassagou significa «Cazadores que confían en Dios» (RFI, 17 de diciembre de 2020).
Dan Na Ambassagou se formó en diciembre de 2016 después de que el entonces líder de la fraternidad de cazadores dogon, Theodore Soumbounou, fuera asesinado en octubre de 2016 por militantes yihadistas que se cree que eran de etnia fulani. Al organizar y movilizar el movimiento Dan Na Ambassagou, los cazadores dogon afirmaron estar cumpliendo el deseo de Soumbounou de proteger de forma organizada Le Pays Dogon (o País Dogon) y a la comunidad dogon (HRW, 4 de diciembre de 2018).
El ala militar del movimiento está dirigida por su fundador y jefe de Estado Mayor, Youssouf Toloba, miliciano de larga trayectoria y antiguo miembro de las milicias Ganda Koy y Ganda Izo, creadas durante la rebelión tuareg en la década de 1990 (Le Point, 12 de diciembre de 2018). El número exacto de milicianos de Dan Na Ambassagou es difícil de estimar, pero los informes indican que hay entre varios cientos y cinco mil miembros (HRW, 7 de diciembre de 2018; Jeune Afrique, 14 de mayo de 2019). El grupo mantiene una estructura similar a la militar; sin embargo, no es un grupo totalmente cohesionado, ya que algunos grupos de autodefensa de las aldeas solo están afiliados nominalmente. Las capacidades militares varían ampliamente dentro del movimiento. Aunque la mayoría están equipados con rifles de caza tradicionales, las unidades de «élite» de Dan Na Ambassagou están equipadas con armas pequeñas y ligeras modernas, que parecen ser rifles de asalto excedentes de los arsenales estatales (Amnistía Internacional, 24 de agosto de 2021). Entre ellos se encuentran el cuerpo de guardia del líder Toloba y el grupo conocido como Fato Camp (o «Los locos») (Pinal, 15 de octubre de 2020), que opera en la zona de Somadougou.
El ex capitán militar Mamadou Goudienkilé dirige el ala política del movimiento (ICG, 9 de noviembre de 2020), que se encarga de coordinar las relaciones con las autoridades y de interactuar con los medios de comunicación.
Actividad y zona de operaciones
El movimiento Dan Na Ambassagou es uno de los grupos armados más activos del centro de Malí. Se han registrado actos de violencia política en los que está implicado en seis de las ocho subdivisiones (o cercles) de la región de Mopti. El movimiento está implicado en una serie de actividades, como la participación en combates, ataques contra civiles, secuestros, saqueos y destrucción de propiedades, extorsión y manifestaciones (véase el mapa más abajo).
Operaciones y relaciones con las fuerzas estatales
El grupo mantiene relaciones con las autoridades malienses a través de su ala política y de emisarios en ciudades como Mopti, Sevare y la capital, Bamako. Las relaciones con las autoridades malienses han estado marcadas por la ambigüedad durante años. En ocasiones ha habido tensiones hasta el punto de que se han producido enfrentamientos abiertos y el ejército ha atacado al grupo con ataques aéreos. La búsqueda de legitimidad de Dan Na Ambassagou es compleja. La organización se nutre de la ausencia del Estado, empleando a menudo un discurso subversivo contra él y llevando a cabo actividades que podrían ir en contra de los intereses del Estado (RFI, 28 de marzo de 2019; 17 de diciembre de 2020). Al mismo tiempo, en su esfera de influencia, el grupo se presenta como representante de la república y aliado indispensable del mismo Estado ausente. El grupo se presenta no sólo como el protector legítimo de la comunidad dogon, sino también como un movimiento republicano y laico que permitiría el regreso del Estado. Esta representación también sirve para legitimar al grupo a ojos de la comunidad internacional, presentándose como una fuerza de contrainsurgencia indígena e irregular que participa en la «guerra contra el terror» en Malí (Cairn.info, 2022).
Dan Na Ambassagou ha realizado intermitentemente patrullas conjuntas con las Fuerzas Armadas Malienses (FAMa) y ha actuado como guía durante operaciones militares. En el campo de batalla, sin embargo, el grupo ha tenido suerte dispar. Se enfrenta regularmente a los militantes yihadistas mejor armados y más curtidos en combate de Jama’at Nusrat al-Islam wal-Muslimin (JNIM), afiliada a Al Qaeda, en particular su subgrupo Katiba Macina. El JNIM ha llevado a cabo campañas periódicas contra Dan Na Ambassagou y las comunidades que lo componen por el control territorial y la influencia sobre la población local. Estas campañas se han intensificado con la retirada temporal de las fuerzas gubernamentales malienses.
Las crecientes campañas militares del JNIM contra Dan Na Ambassagou, y en Le Pays Dogon en general, se han observado desde finales de 2019 y continuaron en gran medida sin obstáculos hasta finales de 2021. Durante este período, los milicianos de Dan Na Ambassagou y Donso sufrieron pérdidas significativas entre los enfrentamientos armados más mortíferos jamás registrados por ACLED en Malí. En marzo de 2020, una gran batalla en la aldea de Borko se saldó con más de 100 milicianos muertos (véase el gráfico siguiente). En octubre de 2021, los milicianos de Dan Na Ambassagou y Donso unieron sus fuerzas en un intento fallido de levantar un bloqueo del JNIM en la aldea de Marebougou, con el resultado de al menos 50 víctimas mortales. En medio de la continua presión del JNIM sobre el movimiento, el líder de Dan Na Ambassagou, Toloba, se ha mostrado especialmente tajante sobre la retirada del ejército maliense de la región de Mopti en los últimos años (Bamada, 2 de octubre de 2020; aBamako, 18 de diciembre de 2020).
Sin embargo, desde finales de 2021, las tropas malienses -acompañadas por las fuerzas del Grupo Wagner2- han reanudado las operaciones militares en la región de Mopti, reactivando la cooperación entre Dan Na Ambassagou y las FAMa. A pesar de la renovada cooperación, las FAMa han acusado desde entonces a algunos grupos armados de autodefensa de aprovechar su renovado compromiso para llevar a cabo «actividades poco ortodoxas y abusos contra poblaciones vulnerables, incluidos actos deliberados de venganza» (Forces Armees Maliennes, 16 de febrero de 2022).
Objetivos civiles
Dan Na Ambassagou depende de la comunidad Dogon para su reclutamiento, financiación y apoyo (RESOLVE, noviembre de 2021). Los miembros de la comunidad Dogon que se oponen o socavan la autoridad de Dan Na Ambassagou son intimidados o atacados de forma rutinaria. Dan Na Ambassagou ha atacado a comunidades dogon extorsionando, secuestrando y asesinando a aldeanos en Bandiagara, Bankass, Douentza y Koro, en la región de Mopti; en particular, a aquellos que se niegan a cumplir las exigencias de dinero y reclutas o que han aceptado acuerdos de paz con comunidades fulani. Al mismo tiempo, el JNIM ha llevado a cabo acciones violentas y no violentas contra las comunidades dogon, coaccionando y haciéndose pasar al mismo tiempo por mediador y garante de los acuerdos de paz entre las comunidades fulani y dogon. Con estas acciones, el JNIM ha socavado tanto la influencia de Dan Na Ambassagou como la de las fuerzas estatales presentes en la región. Dan Na Ambassagou mantiene una fuerte influencia en su bastión tradicional en toda la región de Mopti, incluyendo: en los acantilados de Bandiagara; en las principales ciudades Bandiagara, Bankass y Douentza; y en los alrededores de estas ciudades. El grupo dirige con frecuencia puestos de control, extorsiona a los usuarios de la carretera y secuestra a personas en tramos de las principales rutas de tránsito, principalmente entre Bandiagara y Mopti y entre Douentza y Konna. Sin embargo, la influencia del grupo ha disminuido considerablemente, sobre todo en la llanura de Seno-Gondo, donde el JNIM y sus afiliados llevan a cabo campañas militares sostenidas y participan en acuerdos de paz con las comunidades para afirmar su control.
Dan Na Ambassagou ha acusado repetidamente a los fulani de ser militantes yihadistas o cómplices de albergarlos en sus aldeas y caseríos (HRW, 7 de diciembre de 2018). Las acusaciones contra los fulani se han traducido regularmente en ataques indiscriminados contra la comunidad fulani. Se cree que Dan Na Ambassagou ha perpetrado algunos de los ataques más mortíferos contra civiles en Malí. Estos incluyen atrocidades masivas contra la comunidad fulani en las aldeas de Kologoun-Peulh y Ogossagou en 2019 (FIDH, 26 de marzo de 2019; HRW, 10 de febrero de 2020) (véase el gráfico a continuación), acusaciones que el grupo niega.
La masacre de Ogossagou, en la que al parecer murieron unas 160 personas, provocó la destitución de tres jefes del ejército (Le Parisien, 25 de marzo de 2019), y que el Gobierno anunciara la disolución de Dan Na Ambassagou (BBC, 24 de marzo de 2019). Finalmente, Dan Na Ambassagou se negó a disolverse (RFI, 28 de marzo de 2019) y, en su lugar, dimitió el propio Gobierno del entonces primer ministro Soumeylou Bobeye Maiga (Al Jazeera, 19 de abril de 2019). A pesar de la indignación pública por los ataques indiscriminados de Dan Na Ambassagou, el grupo consiguió suavizar la presión para disolverse. Cabe destacar que el número de muertes causadas por Dan Na Ambassagou ha disminuido significativamente desde principios de 2020 (véase el gráfico anterior), y coincide con el aumento de la presión de los militantes y la retirada de los militares malienses.
De cara al futuro
Las FAMa, junto con el Grupo Wagner, recuperaron terreno en el centro de Mali durante las operaciones militares que comenzaron a finales de 2021. La tendencia a la baja observada en 2021 en cuanto a víctimas mortales civiles se ha invertido desde entonces debido a los ataques a civiles por parte de las fuerzas gubernamentales malienses durante estas operaciones. Dado su pobre historial en materia de derechos humanos y su implicación en atrocidades masivas, la probabilidad de una cooperación más estrecha entre las FAMa, el Grupo Wagner y Dan Na Ambassagou también es motivo de preocupación. El regreso efectivo de las FAMa podría alterar el ya de por sí delicado equilibrio de poder entre los actores armados no estatales y desencadenar nuevos abusos y ataques de venganza. Posteriormente, su regreso podría dar lugar a ciclos de violencia e inestabilidad aún más devastadores, además de los continuos ataques contra civiles en medio de las operaciones militares. Al igual que muchas otras fuerzas estatales de la región, las fuerzas gubernamentales malienses siguen luchando por mantener la presión sobre los grupos militantes, mantener su presencia en muchas zonas y proporcionar estabilidad. Por lo tanto, no se puede descartar otra retirada, ya que se trata de un patrón regular que ha prevalecido en la región del Sahel durante años. Con Dan Na Ambassagou y otros grupos similares reorganizándose actualmente en medio del regreso de los militares malienses junto al Grupo Wagner, es probable que se produzcan nuevos ciclos de violencia en el futuro.